septiembre 23, 2011

ESPARTACO: Un gladiador con corazón de león

Miguel García
Zócalo Saltillo

Foto: Archivo

Esclavo de los romanos, aquel mítico guerrero peleó en el Coliseo contra gladiadores de espada y tridente. Cuando ganó la libertad por sus triunfos, no olvidó a los compañeros. Volvió y consiguió el escape del resto. Desafió al imperio y, aunque murió crucificado, su ideal inspiró múltiples hazañas.

En Saltillo un hombre apasionado por el deporte rudo lo tomó de ejemplo tras una máscara multicolor con forma de yelmo griego. Desde el cuadrilátero, Espartaco evoca los combates de la época entre sangre, polvo y sol, con la atmósfera de la arena similar a la de aquel circo romano.

“Es algo que se vive. La película del Gladiador la veo hasta tres veces. La forma de enfrentamiento, cuerpo a cuerpo, me emociona y sube la adrenalina. Eso lo transporto al ring”, comentó.

“Cuando me pongo mi equipo, mi máscara y me dispongo a tener un combate en contra de cualquier adversario, siento lo mismo”, precisó. “Sé que en las películas es más actuación, pero con nosotros el contacto es directo y agresivo. Pero eso siento al ser Espartaco”.

Cuando recordó a quien le inspiró, su voz se exaltó: “Espartaco era un gladiador fuerte y bueno a la vez. Era el líder. Quiso ser un libertador, aplicar la justicia. No soy un Chucho El Roto, pero me gusta señalar al que hace mal, reclamárselo, decir si está abusando. De alguna manera, soy así”.

Aunque era libre por el perdón, Espartaco volvió para salvar a los opresos. El luchador de Saltillo intenta imitarle en lo deportivo. Promotor del beisbol y la lucha libre, no es egoísta y busca el bien común.

“De nada sirve que yo esté muy bien si los demás están mal. Puedo arrastrar a otros más para que estén mejor, salgan de ese problema, que no sean sobajados de alguna forma, no ser sumisos”, explicó.



















Como luchador alcanzó la gloria en dos ocasiones al coronarse campeón mundial de las Américas y campeón estatal de tríos en la APN, con Rebeldes Tuareg, Nitro y Dr. X. En su profesión no le va mal. “Afortunadamente para mi persona, tengo otro trabajo de a diario; pero desafortunadamente para el luchador, no puedo buscar esas plazas”, recalcó. “Mi trabajo no es la lucha, la practico al 100%. Pero no es mi modo de vida”.

Sin embargo, en su mente habita la idea de hacer giras por México y a nivel internacional. “Cuando vinieron Blue Demon y El Santo y me vieron luchar, me invitaron a Inglaterra. No los pude acompañar. He tenido otras invitaciones a Japón y no he podido ir por cuestiones más importantes”, reveló.

PRIMERO EL BEISBOL
De profesión, ingeniero civil y luchador por afición. Pero el beisbol fue su amor de la infancia. Durante 10 años abandonó el diamante, pero retornó hace 12 para apoyar sin interrupción las ligas infantiles como cuando era joven y jugaba en Ligas Pequeñas.

“Antes jugábamos beisbol con pelotas dañadas, bat de madera a veces hechizos, guantes remendados con alambre de paca. No conocíamos las guanteletas”, recordó. Pese a las carencias de la época, creó a los 13 años su primer equipo con niños de7 a 8 años: Los Venaditos de Compañía Ferretera del Norte.

“Dejé de ayudar a esos niños porque la pelota me costaba 12 pesos y el ampayeo 6 por juego. Sí los pude pagar pero después no hubo manera”, comentó. Pero el esfuerzo lo llevó a cabo.

NACE UN GUERRERO
La lucha la conoció por el profesor Bernardino Silva y a los 14 años debutó en la Arena Obreros del Progreso como Black Star (Estrella Negra). A sus 29 años de trayectoria, Espartaco señaló que cuando pierda la máscara será para retirarse.

“Nunca la voy a dejar de practicar (la lucha), me siento joven. Mi edad todavía me da 15 años más de práctica. Tal vez luche desenmascarado si la pierdo. Hoy me siento preparado y más maduro”, expuso.

El pancracio le ha dado satisfacciones desde antes. “Un tiempo en la escuela de ahí mantenía mis estudios”, dijo. “En Saltillo agarrábamos giras. Salíamos el jueves y regresábamos el lunes por la mañana y salía un dinero para escuela, libros y las inscripciones. Con eso viví, incluso quedaba para algo más”.

Entre sus identidades están Forastero, El Muerto, El Difunto. “Siempre me interesaron los bucaneros y gladiadores. En aquel tiempo buscaba el nombre de Gladiador pero ya existía uno en México”.

También, entre sus rivales, la lista es larga. “He luchado contra el Rayo de Jalisco Sr., el Rayo de Jalisco Jr., el Hijo del Santo. Enfrenté a los Dinamita, los Villanos. Incluso a Último Guerrero y Negro Navarro.

‘CAMPEÓN MUNDIAL
POR DOS SEGUNDOS’
El Último Guerrero es uno de sus más feroces y temibles rivales. Aunque expuso su campeonato mundial peso completo del CMLL en la APN contra el mítico capitán de los rebeldes, no lo aceptó tras su derrota. “Se dio cuenta de la preparación que hay en Saltillo”, dijo. “Ese campeonato no lo tomé a la ligera”.

Pero en una segunda opción, Espartaco tocó la gloria. “En Monterrey expuso el campeonato. La empresa lo obligó a que cumpliera sus palabras. Le volví a ganar, pero en una mala jugada los referís me robaron la lucha. Pero, bueno, fui campeón mundial por dos segundos”, subrayó.

septiembre 19, 2011

Arman catorrazos en el barrio antiguo del Ojo de Agua

Miguel García
Zócalo Saltillo

Foto: Miguel García

Bajo un sol a plomo, feligreses de la Iglesia del Ojo de Agua celebraron la fiesta de su Santo Cristo en el barrio antiguo disfrutando los catorrazos y azotones entre máscaras, llaves al ras de lona y saltos al vacío con un sentido homenaje a la leyenda saltillense, Zorro Plateado Sr.

La función organizada por el Patronato del Coro en esta parroquia tuvo un tinte especial. En la lucha estelar, la dinastía del "Émulo del Santo" triunfó arriba del hexadrilátero en un agarrón de relevos atómicos contra el clan de los Diablos, igual de histórico en el gremio local .

En un día de festejo el folclor mexicano se expresó en todo su color a través de combates de lucha libre con el apoyo del gremio por 30 guerreros, danzas de grupos de matachines, puestos de antojitos y juegos mecánicos.

ZORROS Y KIKAPÚES
'SEÑOREAN' A DIABLOS
Con gente en las gradas, de pie en la colina y hasta en las azoteas de las casas aledañas, el par de Zorros Plateados e Indios Kikapúes bajaron por la colina con el aplauso de la afición. Pero más tarde sería cuando se ganaran por dos caídas al hilo, con gala de técnica y oficio, una gran ovación en compañía de familiares y amigos.

Encapuchados con la tapa plateada del ídolo saltillense, los cuatro gladiadores subieron al ring para recibir los elogios de la comunidad a su padre y abuelo, don José Aguirre Quirino. Enseguida, los rudos del infierno arribaron para retarlos.

El novato Tempestad tuvo lugar en un cuarteto de miedo. Por los oriundos del averno, Sangre Latina, Green Demon y Ángel del Infierno castigaron rápido a los estetas asaltando en montón y ganar igual de pronto la primera caída.

No obstante, la escuela técnica de los Aguirre se impuso ante los Lomelí en dos caídas al hilo. El segundo asalto fue de los limpios a base de lances suicidas por parte de los Zorros y por la intervensión con sendos sentones sobre sus rivales del par de "Jefes Indios".

Para el desenlace, Kikapoo Jr. y Kikapoo trazaron el final con el cristo inverso para Sangre Latina y "La de a Caballo" para Tempestad, respectivamente. Enseguida, Zorro Plateado y Zorro Plateado Jr. se sumaron a la estampa sobre Green Demon y Ángel del Infierno con el castigo que hizo famoso al "Émulo del Santo".

septiembre 04, 2011

Último Guerrero: Orgullo de su raza

Miguel García
Zócalo | Saltillo


Fotos: Gerardo Ávila - Miguel García


“Primero viví el hambre. Sufrí mucho por ese lado. Vivía debajo de un ring. Mi comida diaria era un kilo de tortillas y un aguacate durante
uno o dos años. Pero no había más y yo quería la lucha, ser luchador famoso”, confesó Último Guerrero, ex campeón mundial del CMLL y orgullo de la Comarca Lagunera.

Aquel niño de Durango no cabría de felicidad por ver hechos realidad sus más dulces sueños en el ring. El joven Flanagan imaginó la grandeza, pero parecía lejos de alcanzarla. Hoy, a sus más de treinta años, goza de éxito, respeto y fama bajo otra identidad. Sin embargo, todo le costó paciencia, hambre y sudor.


“En algunos momentos flaqueé, me ponía a llorar y decía que estaría mejor en mi casa con frijolitos, sopa o lo que sea pero con mi familia. No aquí, solo y sin nada”, recordó con humildad. Pero el oriundo de la Comarca Lagunera superó la adversidad a través de dedicación, ejercicio duro y Fuerza Guerrera, quien dio trabajo de soldador a un muchacho de provincia cargado de anhelos.

Hoy aquellas tardes amargas sólo son un recuerdo porque ahora el “Último de su Estirpe” ocupa un sitio de honor entre las estrellas. Gracias a su perseverancia, tocó la gloria “desde abajo” y está pronto a representar a México en una gira por Japón el domingo 10 de octubre con la empresa New Japan Pro Wrestling.


‘REY DE PESOS
COMPLETOS’

El gladiador de “Otro Nivel” cosechó triunfos y derrotas. Pero antes de perder contra Héctor Garza, reinó por tres años como el campeón mundial de p
eso completo del CMLL con sinnúmero de defensas. Por si fuera poco, ganó la primera edición del Campeón Universal, cuyo título no se expone en un año.

Sus trofeos han sido las máscaras de Mr. Águila y Villano V, hijo de Ray Mendoza, contra quienes expuso su incógnita tan cotizada por sus 21 años de trayectoria. Hoy su máxima ambición es destapar a Atlantis, quien disolvió 6 años de los Guerreros de la Atlántida para retornar al bando técnico.

“Esta separación me dolió bastante, pero se está acomodando el ajedrez como yo quiero… Atlantis es el luchador con más años y trayectoria en el CM
LL”, reconoció. “Ahora los luchadores son muy jóvenes y como Atlantis, creo que es el único, el estandarte de la empresa. Sería un bonito trofeo”.

‘EL ÚLTIMO DE

SU ESTIRPE’
En la aridez del desierto se forjó un guerrero, con amor puro a los catorrazos que corre por sus venas. Su papá es aficionado a la lucha libre. De niño lo llevaba a la Plaza de Toros de Torreón. “Crecí con la lucha. Tenía mis monitos, mis máscaras. Una de Dos Caras y otra de Mil Máscaras eran las preferidas”, señaló.

En la colonia Sacramento de Gómez Palacio, había un cuadrilátero de ladrillo con tres juegos de cuerdas. Un espacio del ring era pared. “Me inició el luchador Detector. De cariño le decíamos ‘Toñito’”, dijo. Después entrenó más en forma en la Arena Olímpico Laguna en 1989. Su debut profesional fue en 1990 en el mismo coso con el nombre de Flanagan, inspirado en el personaje cómico de Héctor Suárez.


“En las botas se veía el slogan de ‘Queremos rock’. Hacía pareja con Súper Punk. Éramos la pareja local, subimos muy pronto por las aptitudes”, describió. “Éramos los luchadores que recibían a la gente de fuera y México. Ahí luché contra Scorpio, Octagón, Rey Misterio, Los Dinamita”.

“En el ‘95 como todo luchador de provincia fui a probar suerte a la capital del país. Me fui con una mano adelante y otra atrás a buscar la fama”, dijo. Le abrieron las puertas de Promo Azteca. “Ahí nació el nombre de Último Guerrero”, mencionó. Su amigo Súper Punk fue Último Rebelde.

Para sobrevivir en la Ciudad de México, entró a una fábrica de soldadura, propiedad del mítico rufián Fuerza Guerrera. Aunque truncó sus estudios en una carrera técnica para entrenar, no se arrepiente. “Fue la que me sacó adelante porque de lucha no había nada”, dijo con pena.

¿Con una pobre alimentación es posible un buen rendimiento?
Se reían cuando vivía en el gimnasio porque llegaba de trabajar a las diez de la noche y me ponía a hacer ejercicio sin haber comido. Me decían el loco… Pero ahora soy Último Guerrero y me siento muy orgulloso y una persona muy realizada por hacer todo lo que quería…

La salida de la empresa surgió por una lucha de apuestas que no le convenía en lo económico y profesional. “No me sentía capacitado, me sentía débil y no la acepté… Yo quería hacer historia en México… Toqué las puertas del Consejo y se me abrieron”, comentó.


Un 12 de diciembre de 1997 el ej
ecutor del “Sentón de la Muerte” debutó en la Arena Coliseo con la segunda lucha. Pero la directiva del CMLL le pidió cambiar el diseño de su tapa. Ángel Azteca fue el creador. Viendo su gusto por una máscara en especial, se la obsequió. “Es tuya, me dijo. Se la mostré a la empresa y les encantó”, indicó.

¿Fue difícil conseguir todo el éxito?
Cuando uno tiene hambre para comer, de triunfo y muchas ganas, lo difícil pasa a segundo término. Se vuelve como un capricho. No voy a regresar a mi tierra y fracasado.


¿Entonces lo de Guerrero no es de a gratis?

Creo que no. Pero ésta es una historia mía, hay historias de muchos luchadores que han batallado bastante y otros que nacen con una estrella…




TRAS LA AGONÍA,

LLEGA LA GLORIA
Cual conquistador, Último Guerrero domina México y el mundo. “Fue el primer torneo que hizo la empresa para tener un Campeón Universal (2009) y lo gané contra Texano Jr.”, recordó. El segundo lo ganó Liger, pero el CMLL le regaló una réplica. “Está en mi casa y ahí se va a quedar”.


Su recompensa le da fuerzas para continuar en la cima. “Me siento contento y a la vez comprometido. Te tienen como un símbolo de la Laguna, así que no hay que dar marcha atrás y no quedar mal”, dijo.


Lo único que resta al “Último de su Estirpe” es ganar más máscaras o perder la suya. Si sucediera, “me volvería 2000% Guapo…”, afirmó entre risas. “Es una etapa y es algo que cuidamos mucho. Pero es un ciclo que se termina. El que lucha es el mono, no la máscara”.


¿Qué opinas de la etapa violenta del país?

Ahora estamos consternados por lo que pasó en M
onterrey. Semanas antes hubo un altercado con disparos en el estadio del Santos. Nos afecta a todos que nos dedicamos a dar espectáculo donde hay masas de público. No estamos a gusto. Ya atentaron contra los civiles y eso es denigrante.

¿Cómo puede ayudar la lucha libre?
Nosotros aportamos cierta alegría a toda la gente. Mi granito de arena es dar un buen espectáculo y que la gente que asista se olvide un poco de toda la violencia. Como lo dijo el escritor Carlos Monsiváis, la lucha libre es un desfogue donde la gente va a gritar lo que no puede gritar en casa.